Johnnie Walker Black Label tiene sus raíces en mezclas de whisky elaboradas desde el siglo XIX. Su versión moderna mantiene la tradición de utilizar más de 40 whiskies de malta y grano cuidadosamente seleccionados, provenientes de diversas regiones de Escocia, incluidos whiskies de Islay, Speyside, Highland y Lowland.
Notas de Cata
Apariencia: Ámbar profundo con reflejos dorados.
Aroma: Complejo y elegante, con notas de frutas secas, caramelo, vainilla, miel y un ligero toque ahumado.
Sabor: Suave y equilibrado, con matices de caramelo, frutas maduras, especias dulces y un distintivo ahumado de turba.
Final: Medio-largo, con notas persistentes de roble tostado, especias y un ahumado sutil.