Notas de cata:
Aroma: Una nariz maravillosamente suave y redondeada, con una mezcla de ahumado seco y la dulzura de las pasas.
Sabor: Una combinación aterciopelada de vainilla, miel y pétalos de rosa, que se amplía para incluir un sabor a naranja con notas de avellana, jerez y chocolate negro.
Final: Un final rico y lujosamente largo, que muestra la característica ahumada de Johnnie Walker de la manera más sofisticada.
Cada botella de Johnnie Walker Blue Label es el resultado de una cuidadosa artesanía, donde solo uno de cada diez mil barriles posee la calidad y el carácter necesarios para formar parte de esta mezcla exclusiva. Este whisky es ideal para ocasiones especiales, ya sea disfrutado solo para apreciar su complejidad o compartido en celebraciones que merecen un toque de distinción.